Empezamos el ciclo escolar y para muchos padres es difícil mandar al pequeño al colegio. Tenga la certeza que su decisión ha sido la correcta, pues los beneficios que un pre-escolar le brinda al niño han sido comprobados por los especialistas.
Gran parte de la capacidad intelectual del ser humano, toma como base los primeros años de conceptos. La seguridad e independencia que los pequeños adquieren a través de la interacción con otros niños y la solución de pequeños desafíos son un regalo que usted les dará para toda la vida.
Es de suma importancia recordar que tanto los niños que ingresan por primera vez al colegio, como los padres de estos experimentan un cambio importante en su vida. Como todo cambio este necesita ser asimilado y se requiere de un poco de tiempo para lograrlo.
El proceso de adaptación del niño se verá en parte influenciado por la seguridad que los padres les transmitan a sus hijos. Recuerde que si usted está tranquilo, el niño también lo estará. Háblele de todas las cosas buenas que encontrará en el colegio: los juegos, las canciones, los amigos, etc... De esta forma el pequeño tendrá una imagen positiva del colegio. Asegúrese de que el pequeño sepa que alguien de su familia lo vendrá a recoger en unas cuantas horas, esto le dará confianza al niño.
Las reacciones de los niños varían según el temperamento y el grado de apego que este tengan con sus padres. El niño que llora no lo hace necesariamente por sufrimiento, lo hace porque para ellos es difícil dejar de ser el centro de atención y en el colegio se les hace difícil compartir la atención de los adultos.
El proceso de adaptación varía según el niño. Con los más pequeños dura aproximadamente un mes, por esta razón hay que tener mucha paciencia y brindarle la seguridad y apoyo que el necesita. Al pasar los días usted se sorprenderá de ver a su hijo totalmente adaptado y feliz en el ambiente escolar.
Licda. Mónica Preti de Sobalvarro